Mejorar la detección temprana del cáncer: Proporcionar una herramienta asequible y accesible que permita diagnosticar el cáncer en sus primeras etapas, aumentando las tasas de supervivencia y reduciendo los costos de tratamiento.
Promover la equidad en el acceso a diagnósticos médicos avanzados: Hacer posible que clínicas, hospitales y comunidades en países en desarrollo o con recursos limitados accedan a la tecnología de resonancia magnética (IRM) de última generación.
Fomentar el uso de tecnologías innovadoras: Introducir un escáner IRM de bajo coste que combine portabilidad, inteligencia artificial y técnicas avanzadas de procesamiento de imágenes para mejorar la calidad del diagnóstico.
Contribuir a la sostenibilidad del sistema de salud global: Reducir los costos operativos asociados con la resonancia magnética tradicional, permitiendo su implementación en una variedad de entornos médicos.
Reforzar la lucha contra el cáncer a nivel mundial: Incrementar las oportunidades de diagnóstico temprano en áreas rurales y regiones con recursos médicos limitados, ayudando a salvar vidas y mejorar la calidad de vida de los pacientes.